La Generación del 98
Miguel de Unamuno: En su primera novela, Paz en la guerra, sigue el modelo realista, pero en sus siguientes obras, que él denomina nivolas, une la filosofía a la literatura y muestra su preocupación por España y la lucha entre la fe y la razón. Entre las nivolas destacan: La tía Tula, Abel Sánchez, Niebla o San Manuel Bueno, mártir.
Pío Baroja: Parte del realismo, pero introduce elementos renovadores: participa en la acción con comentarios e introduce diálogos y descripciones para evitar la monotonía del relato.
José Martínez Ruiz, Azorín: Sus novelas, que apenas presentan argumento, son un retrato de las tierras españolas y de sus habitantes. Algunas de ellas son: La Voluntad, Las confesiones de un pequeño filósofo.
Ramón María del Valle-Inclán: Las primeras novelas de este autor, entre las que figuran sus Sonatas, se enmarcan en el modernismo. Evoluciona hacia la novela histórico-esperpéntica, en la que mezcla los personajes reales y ficticios en obras como la Trilogía «La guerra carlista», pero su aportación más relevante es el esperpento, que introduce en la novela Tirano Banderas.
Antonio Machado: Se le conoce principalmente por sus obras poéticas, que evolucionan desde el intimismo romántico de Soledades a las reflexiones filosóficas de Nuevas canciones, pasando por el modernismo y el objetivismo en Campos de Castilla, obra en la que muestra su preocupación por el paso del tiempo y su gusto por el paisaje castellano.
Características del Novecentismo
- Manifiestan racionalismo en el análisis de la realidad, claridad expositiva y rigor intelectual. Analizan la realidad de forma objetiva, expresado con claridad, lenguaje intelectual.
- Rechazan lo sentimental. Prefieren contener las emociones y predican actitudes equilibradas y serenas.
- Defienden el arte puro, que no debe tener como única finalidad el disfrute, ni ser vehículo de inquietudes religiosas o políticas ni emociones personales.
- Sus textos van dirigidos a minorías selectas de intelectuales. Juan Ramón Jiménez las llamará «la inmensa minoría».
- Realizan obras bien hechas con un estilo cuidado y pulcro.
- Todos ellos manifiestan una profunda vocación de formar a las minorías del país (alfabetización).
Novecentismo y Vanguardias
El novecentismo y las vanguardias son dos movimientos que tienen lugar en el periodo de entreguerras (1918-1939) que se caracterizan por la reacción contra la literatura y el arte modernista.
Novecentismo
Es un movimiento propio de España que surge hacia 1910 y cuyos autores encarnan al nuevo intelectual que se preocupa por la forma y persigue el arte puro, cuya única finalidad es el goce estético.
Ensayo
Género más cultivado. Entre los autores destaca José Ortega y Gasset, quien, con un estilo claro y cuidado, aborda en sus escritos temas diversos como la cultura, el arte o la vida cotidiana (La deshumanización del arte).
Novela
Se aleja del sentimiento y de la reproducción de la realidad. Entre los autores relevantes están Gabriel Miró (El obispo leproso) y Ramón Pérez de Ayala (Tigre Juan).
Poesía
Buscan alejarse del modernismo. El autor más representativo es Juan Ramón Jiménez, cuya obra evoluciona desde el intimismo presente en Arias tristes, a la poesía desnuda de Diario de un poeta recién casado. Este poema habla de cómo su poesía evoluciona con el paso del tiempo.
Vanguardias
Tras el modernismo se abre el periodo de las vanguardias.
Futurismo
Defiende la ruptura total con la cultura anterior exaltando la modernidad, la mecánica y la técnica. Comienza en Italia con Filippo Tommaso Marinetti (Manifiesto).
Cubismo
Reivindica la autonomía de la obra de arte; el escritor pretende captar la simultaneidad de la realidad. Destacan los caligramas del francés Guillaume Apollinaire.
Dadaísmo
Pretende demostrar lo absurdo de la vida. Su creador es el rumano Tristan Tzara (El hombre aproximativo).
Surrealismo
Defiende una revolución total del ser humano, al que quiere transformar a través de la imaginación y de la poesía. Busca una realidad superior, ajena a cualquier razón estética y moral. Su precursor es el francés André Breton (Manifiesto surrealista).
Vanguardias en España
Se desarrollan movimientos propios:
Creacionismo
El poeta rompe con la realidad existente y crea una nueva realidad que tiene sentido por sí misma. Entre los seguidores de este movimiento hay que mencionar a los autores españoles Gerardo Diego y Juan Larrea y al chileno Vicente Huidobro (Arte poética).
Ultraísmo
Pretende dar una mayor importancia a la imagen y a la metáfora, suprimiendo lo narrativo. Destacan Pedro Garfias (El ala del sur) y Guillermo de la Torre (Hélices).