Poesía Medieval Española: De las Jarchas al Siglo XV

Poesía Lírica Primitiva

Lírica Culta

Catalana

Surgió en Provenza, pasando a Cataluña a través de casi 100 cancioneros. Los trovadores pertenecían a distinta condición social y tenían una sólida formación. Sus composiciones, destinadas al canto, fueron divulgadas por los juglares. Esta poesía era un arte refinado y difícil que tenía rima consonante y, a menudo, ocho versos.

Sus géneros son:

  • Cansó: Composición amorosa, de hombre a mujer. Las relaciones se entendían como las de señor y vasallo, y su lenguaje era feudal.
  • Sirventés: Expresión de ira, reprensiones, ataque personal.
  • Alba: Expresaba la separación de los amantes al amanecer.
  • Pastorela: Descripción del encuentro de un caballero y una pastora en el campo.
  • Planto: Expresaba el llanto, las lamentaciones y virtudes del difunto.
  • Tensó: Consistía en un debate poético.

La concepción del amor cortés: Era el arte de amar de la cortesía y fue entendido como un servicio a la dama, considerada un ser superior. Cuatro etapas:

  • Feñedor: Aún no se atreve a expresar sus sentimientos a la dama.
  • Precador: Ya le manifestaba sus sentimientos.
  • Entendedor: Es correspondido por ella.
  • Drudo: Se convierte en su amante.

Gallego-Portuguesa

(Cantigas de amor) Son herederas de la cansó provenzal. El yo poético es un hombre que se dirige a una dama de la que se queja de su indiferencia. El gozo amoroso se transforma en tristeza y sus elementos se sitúan en el entorno urbano. Se presenta una métrica variada y división estrófica compleja.

También incluye:

  • Cancionero de burlas: Aquí encontramos las cantigas de escarnio (sátiras y de carácter personal) y las cantigas de maldecir (ataques directos a grupos o personas concretas).
  • Cancionero religioso: Constituido por las cantigas de Santa María, del rey Alfonso X el Sabio. De las 420 cantigas, solo 64 son de carácter lírico, en alabanza a la Virgen y referidas a festivales religiosos; la mayoría son narrativas y relatan sus milagros. Los versos varían entre las 2 y 24 sílabas y entre ellos destaca el alejandrino.

Árabe y Hebrea (Andalucía)

El tema fundamental es el amor (a veces de tipo homosexual). El escenario es urbano, aparecen referencias a la flora y la fauna. Surgieron dos tipos de poemas:

  • Moaxaja: Se escribió en árabe clásico y después en hebreo. La última estrofa se remataba con unos versos, denominados jarchas. (aa) bbbaa, cccaa.
  • Zéjel: Se compuso en árabe dialectal y carecía de jarcha. aabbba, aaccca.

Lírica Primitiva Popular

Jarchas

Son los versos que cerraban las moaxajas. Compuestas en árabe o hebreo vulgares o en romandalusí. La mayoría constan de 4 versos, sobre todo hexasílabos y octosílabos, con rima consonante. El tema es casi siempre amoroso: el emisor, una joven enamorada, cuenta su sufrimiento a su madre, hermanas o amigas, en un entorno urbano. Un rasgo característico es la mención del amado por medio del sustantivo habib.

Cantigas de Amigo

El emisor es también una muchacha enamorada, que expresa sus sentimientos a su madre, hermana o amigas: dolor por la muerte o ausencia del amado, ansiedad, melancolía o alegría por su regreso. La naturaleza cobra gran importancia, con la que el yo poético se identifica y a la que se dirige para preguntarle por el amigo ausente. Utiliza un lenguaje popular. Su forma es la estrofa monorrima, seguida de un estribillo también monorrimo. Su principal recurso es el paralelismo.

Villancicos

Se componen de poemas cultos. El resto de la composición constituye su glosa (comentario del motivo del villancico inicial realizado por un poeta culto). El tema más común es el amoroso. El lugar del encuentro es un entorno rural, en el que cobra relevancia el agua. Son frecuentes los motivos de los cabellos de la joven y las flores (que cortadas simbolizan la pérdida de la virginidad). Ausencia de adjetivos, verbos de movimiento, diminutivos, oraciones exhortativas, desiderativas, repeticiones y paralelismo.

Poesía Cancioneril

Tiene su base en la poesía trovadoresca. Dos tipos:

  • Cantigas: Destinadas al canto, tema amoroso. Constituida por la introducción, la variación (serie de versos con rima diferente a la introducción) y la vuelta (versos finales que retoman la rima de la introducción).
  • Decires: Composiciones más largas, destinadas a la lectura. Desde mediados del siglo se denominaron coplas.

Poesía Amorosa

Su tema es el amor. El amor es la fuerza sobrecogedora que se incrementa con la resistencia de la amada: se acepta el sufrimiento por amor, y hasta se halla placentero; incluso se prefiere la muerte por amor a su ausencia. La mujer aparece como la bella dama sin piedad. El léxico expresa metafóricamente el sometimiento del caballero a la dama, se relaciona con la guerra y con la religión. Se percibe una corriente de erotismo, que incluso llega a ser obscena. Como eufemismo se alude a las relaciones sexuales: morir, muerte, paraíso adquieren valores relacionados con el sexo.

Poesía Moral y Religiosa

Algunos poemas critican los abusos de grupos o individuos. Otros condenan el mundo, se muestran estoicos ante los abusos a la censura y profetizan sobre el futuro. La poesía religiosa critica la corrupción y su objetivo es provocar sentimientos de pena. Incluye gozos, pesares y loores de la Virgen.

Grandes Poetas del Siglo XV

Destacan Marqués de Santillana y Jorge Manrique.

Marqués de Santillana

Cultivó la poesía moral y alegórico-narrativa (El infierno de los enamorados). Sobresalen las serranillas, que narran el encuentro entre un caballero y una pastora. Estas composiciones contraponían personajes de estamentos sociales muy diferentes.

Juan de Mena

Autor de cantigas y decires amorosos de tono intelectual y estilo artificioso, su obra más destacada es Laberinto de Fortuna.

Jorge Manrique

Es el máximo representante de la lírica castellana del siglo XV. Su obra cumbre es el poema elegíaco Coplas a la muerte de su padre. Esta consta de 40 estrofas denominadas coplas. Constituida por 12 versos que siguen el esquema métrico 8a8b4c. Se distinguen dos partes: la primera, de carácter general, comprende las primeras 24 estrofas; la segunda exalta la figura del padre del autor, don Rodrigo Manrique.

Primera Parte

Centrada en la fugacidad de la vida terrenal (coplas I-III: doctrina del menosprecio del mundo; copla IV: invocación a Dios, en consonancia con la tradición cristiana; coplas V-VII: alternativa, conquista de la vida eterna; coplas VIII-X: juventud, nobleza y poder; coplas XI-XIII: fugacidad de las cosas terrenas); ejemplificación de los puntos anteriores: la muerte igualatoria para todos, ubi sunt? (copla XIV: muerte como igualatoria; coplas XV-XXIV: ubi sunt? Nueva mención a la muerte igualatoria e inevitable).

Segunda Parte

Centrada en la vida de su padre, en sus virtudes como guerrero y en su muerte (coplas XXV y XXVI: virtudes del maestre don Rodrigo; coplas XXVII y XXVIII: exaltación de don Rodrigo Manrique, comparándolo con prototipos de la antigüedad; coplas XXIX y XXXII: vida militar del maestre; coplas XXXII-XL: diálogo del maestre con la muerte, invocación a Dios, y estrofa de cierre.

Estilo Manriqueño

Caracterizado por su naturalidad e innovación. El poeta sustituye el estilo elevado de la gran poesía del siglo XV por un estilo humilde. Empleo de metáforas e imágenes. En relación con la presencia del ubi sunt? en las coplas, son habituales también las interrogaciones retóricas. El autor pretendía llegar a todos los públicos.

Tema de las Coplas

La Muerte

Poseedora de un poder igualatorio y contra la cual es imposible oponer resistencia, fue recurrente en la literatura castellana del siglo XV. En las coplas, no describe la muerte con rasgos macabros, sino su presencia como ministra de Dios. La muerte acude en busca de don Rodrigo, lo invita a lograr su última victoria y le anuncia su recompensa. Con valor y resignación, el padre del poeta no reacciona contra ella sino que implora con serenidad el perdón a Cristo.

La Fama y la Vida Eterna

La fama adquirida por los actos realizados en esta vida repercute favorablemente en el goce que los bienaventurados tendrán en la otra. Gracias a las buenas obras realizadas en su vida terrenal y a la fama adquirida por ella, don Rodrigo consigue vencer a la muerte y alcanzar, de esta forma, la vida eterna.

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