Contraste entre Modernismo y Generación del 98 en la Literatura Española

Modernismo y Generación del 98

Desde finales del siglo XIX surgen en Europa y América corrientes renovadoras opuestas al Realismo. En España e Hispanoamérica, este movimiento renovador (que abarca el final del XIX y las dos primeras décadas del XX) recibe el nombre de Modernismo. Inicialmente, el término fue peyorativo, referido a jóvenes que se autodenominaban «gente nueva» y mostraban desprecio por los autores más tradicionales y la literatura realista. Estaban influenciados por la literatura francesa contemporánea, específicamente por dos movimientos: Parnasianismo y Simbolismo.

Por otro lado, se utilizó el término Generación del 98 para aquellos que mostraban mayor interés por los contenidos humanos y adoptaban una actitud crítica frente a la situación política y social de España. Ambos movimientos coinciden en el tiempo y algunos escritores participaron de ambas tendencias, como Antonio Machado o Ramón María del Valle-Inclán. Así, Modernismo y Generación del 98 son considerados movimientos de renovación literaria.

En la relación 98-Modernismo, se caracteriza al primero como reflexivo, adusto y patriótico, mientras que al segundo se le ve como intuitivo. El Modernismo se manifiesta como una superación de las fronteras nacionales y tiene una ambición cosmopolita. La Generación del 98, en cambio, no es un movimiento expansivo; su preocupación es España. Sus integrantes son hombres tristes y ensimismados, analíticos y meditativos. Mientras el modernista goza de la vida, el del 98 realiza un examen de conciencia. En común, presentan las fuentes extranjeras y el uso de los mismos medios de publicación, una rebelión frente al aburguesamiento del arte y un compromiso de interpretación unitaria del mundo. Ambos nacen de la insatisfacción con la literatura realista y naturalista, sintiendo la necesidad de rebelarse contra las normas estéticas imperantes.

Modernismo

El Modernismo fue un movimiento no muy duradero, pero su influencia en la literatura posterior fue decisiva. Se buscaba un arte provocador. Como forma de vida, asumieron la bohemia y una actitud de rebeldía moral. Presenta una importante influencia romántica; de hecho, en algunos países hispanoamericanos se considera un Romanticismo tardío. Las novedades más importantes provienen del Parnasianismo y del Simbolismo franceses. El Parnasianismo busca la perfección, mientras que el Simbolismo se sirve de símbolos.

Características:

  • Rechazo de la mediocridad y vulgaridad: Los modernistas rechazan la sociedad de su tiempo, mostrando gusto por lo exótico y lo exquisito, que buscan en el mundo antiguo, el pasado medieval, la mitología germánica, la civilización asiática y la creación de un mundo lleno de belleza. Este deseo de evasión también les lleva al gusto por los viajes y los lugares distintos, siendo París su ciudad por excelencia.
  • Esteticismo: La estética modernista se define por:
    1. Evocación del mundo sensorial.
    2. Musicalidad y renovación métrica: importancia del ritmo y la armonía. Recuperan metros olvidados o poco utilizados (alejandrino, eneasílabo) y crean otros nuevos de hasta veinte sílabas. Uso del verso libre, aliteraciones y palabras esdrújulas.
    3. Riqueza verbal y capacidad de sugestión: léxico extraño que llama la atención.
    4. Temas: recreación del pasado, el amor y el erotismo.

Poetas Modernistas:

Rubén Darío

Se le considera el iniciador del Modernismo y el responsable de su difusión en España. Vivió en varios lugares, progresivamente estragado por el alcohol (llevó una vida bohemia en Madrid) hasta que, próxima su muerte, regresó a su país natal. Se publicó una ley en Nicaragua para que pudiera divorciarse, aunque el divorcio nunca fue efectivo porque su mujer se opuso. Influyó en los más jóvenes (los hermanos Machado, Juan Ramón Jiménez) y en Valle-Inclán. Sus poemas presentan lenguaje culto, ritmo y sensaciones, tratando de mundos y seres fabulosos. Su obra Azul inaugura el Modernismo. En sus obras predomina el tema amoroso.

Manuel Machado

Once meses mayor que su hermano Antonio. Llamaba a sus creaciones «semipoesía». Su adhesión al movimiento franquista es circunstancial, geográfica y obligatoria.

Antonio Machado (1875-1939)

Sevillano, comienza a escribir en París en publicaciones modernistas. Se inicia en el Modernismo para terminar acercándose al estilo noventayochista. Su estilo se caracteriza por la ausencia de complejidades retóricas. El primer poemario importante del autor es Soledades. Imitó mucho a Darío en su primera época. Como rasgos modernistas, destacan la estrecha relación entre el paisaje y el estado anímico del autor, la presencia de símbolos, el léxico y el predominio de los aspectos musicales y cromáticos. Predomina el intimismo, el tono melancólico y el simbolismo de algunos motivos reiterados. Tras la muerte de Leonor, publica Campos de Castilla (1912), donde su poesía se hace más austera, realista y apegada al paisaje que le rodea. Se traslada a Baeza.

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