Miguel de Cervantes (1547-1616)
Nació en Alcalá de Henares. Vivió en Italia y presenció la batalla de Lepanto, donde fue herido en la mano izquierda. Regresó a España en un barco con piratas turcos, quienes lo mantuvieron en cautiverio en Argel. Cuando regresó a España, fue comisario en Sevilla y vivió sus últimos años en Valladolid y Madrid.
Obra Poética y Dramática
Poesía
No debe su fama a la poesía. Su composición más importante es El viaje del Parnaso, compuesta por tercetos, 8 capítulos y cerca de 3000 versos. La figura literaria de Cervantes fue universal.
Teatro
Adquirió fortuna como autor dramático hasta la aparición de Lope de Vega (corrales de comedia), sin restar valor a sus obras.
En su primera época, escribió El cerco de Numancia, que es una tragedia. En su segunda época, escribió comedias como Los baños de Argel, El gallardo español y El rufián dichoso; entremeses como El retablo de las maravillas, El juez de los divorcios, La cueva de Salamanca, El vizcaíno fingido y La elección de los alcaldes de Daganzo.
Las comedias tratan temas de cautivos, y los entremeses son piezas cortas escritas en prosa, inspiradas en la literatura popular, ingeniosas, con humor y sátira social.
Novela
Cervantes, un gran genio y excelente artista literario, es considerado el padre de la novela corta. Escribió las siguientes novelas:
- La Galatea: Novela pastoril compuesta de 6 libros, que trata sobre el desengaño amoroso, pastores refinados y el paisaje idealizado. Dentro de La Galatea se encuentra el Canto a Calíope, un juicio a escritores que lo habían criticado.
- Novelas ejemplares: Doce novelas cortas que tratan temas como la infidelidad y los celos (El celoso extremeño), el amor (La gitanilla y La ilustre fregona), la agudeza de la locura (El licenciado Vidriera), la crítica de personajes y costumbres sociales (El coloquio de los perros) y la picaresca (Rinconete y Cortadillo). Estas novelas muestran la madurez de su arte literario y el dominio de la narración, y no se pueden considerar didáctico-moralizadoras.
- Los trabajos de Persiles y Sigismunda: Sigue el modelo de novela bizantina (aventuras, peligros…), con un estilo cuidado, elegante y armonioso. Publicada póstumamente.
El Quijote
Publicación
- Primera parte: El ingenioso hidalgo don Quijote de la Mancha (1605). Deja entrever la posibilidad de continuar las aventuras.
- En 1614, aparece una continuación apócrifa hecha por Alonso Fernández de Avellaneda, que incita a Cervantes a escribir la segunda parte.
- Segunda parte (1615): Contesta a los ataques de Avellaneda en el prólogo.
- Tuvo un gran éxito inmediato tras su publicación.
- Traducida al francés, inglés e italiano. Es la obra más traducida de todos los tiempos.
- Consagró a su autor como uno de los escritores más insignes de la literatura española y universal.
Dos Partes del Quijote
- Primera parte (1605): Varios relatos interrumpen la acción central (pastoril: Marcela y Grisóstomo; sentimental: Cardenio y Luscinda; morisco: Historia del cautivo; psicológico: El curioso impertinente). Las aventuras se hilan con cierta autonomía, predominan los hechos y la acción, y Don Quijote va creando su fama mediante su locura.
- Segunda parte (1615): Los pocos episodios al margen no interrumpen la acción central. Hay una mayor interrelación entre episodios y sucesos. El diálogo da a conocer la psicología y el conocimiento de los protagonistas. Los personajes que se encuentran con Don Quijote ya conocen sus aventuras por la primera parte.
Argumento
- Primera parte: Dos salidas (la segunda con Sancho). Don Quijote decide ser caballero andante y lo hace en una venta que él cree que es un castillo. Le suceden aventuras (molinos de viento, galeotes, etc.) de las que normalmente sale malparado. Al final, el cura y el barbero de su pueblo, haciéndole creer que está encantado, lo hacen regresar al pueblo encerrado en una jaula.
- Segunda parte: Narra la tercera salida de Don Quijote con Sancho. Se dirigen al Toboso, donde vive Dulcinea, y tienen diversas aventuras en el camino. Después se dirigen a Aragón. Sucede la aventura de Clavileño, y Sancho gobierna la ínsula Barataria. Llegan a Barcelona, donde Don Quijote es vencido por el Caballero de la Blanca Luna (su amigo Sansón Carrasco), quien le había impuesto la condición de que, si era vencido, volviera a su casa. Don Quijote regresa y muere cuerdo, rodeado de su familia y amigos.
El Quijote y las Novelas de Caballería
La intención era ridiculizar tanto las novelas de caballerías como el mundo que presentaban. Cervantes construyó una parodia llena de situaciones inverosímiles que deformaban los hábitos caballerescos. Eligió como protagonista a un hidalgo que se vuelve loco, se hace caballero para acabar con los males del mundo, elige a una dama campesina (Dulcinea) y un rocín flaco (Rocinante). El Quijote es una novela de novelas, ya que abarca muchas historias, algunas auténticas.
Don Quijote y Sancho Panza
Se necesitan mutuamente; son complementarios. Don Quijote aporta su idealismo y su fantasía, y Sancho es materialista. Ambos evolucionan (influencia recíproca). Sancho se deja arrastrar por las locuras e ideales de su amo, y Don Quijote muere cuerdo y pidiéndole perdón.
- Don Quijote: Está loco en cuanto a la caballería, pero conserva el sano juicio y el criterio justo.
- Sancho Panza: Es un rústico campesino, pero también sabio, que advierte a su amo de sus locuras y lo sigue para recibir el mando de alguna ínsula y casar bien a su hija.
La Riqueza e Interpretación del Quijote
La novela no es un simple relato de aventuras; fue entendida en su tiempo como parodia y obra cómica. Trata temas literarios, morales, religiosos… y también aspectos como el heroísmo, la libertad, la ilusión, la realidad y el ideal. Ha despertado múltiples interpretaciones y valoraciones.
Estilo
Cervantes manejaba diversos estilos de lenguaje, con gran maestría en la narración y en el uso de recursos. También usa la ironía y el humor.
Lenguaje de los Personajes
- Quijote: Arcaizante y ridículo, pero también culto y bien construido.
- Sancho: Popular, pero no vulgar.
Los diálogos entre Don Quijote y Sancho son sabrosos en su lenguaje y contenido. Cervantes es un maestro del diálogo, que es importante en la obra y sirve para dar entrada a diferentes puntos de vista, perfilar los caracteres de los personajes, y son divertidos, ágiles e interesantes.
La Literatura del Siglo XVII: Poesía y Prosa
Las tres grandes corrientes del Barroco son: el conceptismo, el culteranismo y el naturalismo exagerado de la picaresca y de la literatura satírica.
Conceptismo y Culteranismo
Ambas corrientes van más allá de la poesía, el teatro, la prosa y la narrativa. Se alejan del Renacimiento y contienen un gran escepticismo vital que hace que se huya en dos direcciones distintas: la conceptual (retorcimiento de la forma) y la culta (preocupaciones conceptuales).
Ambas corrientes barrocas rompen con el equilibrio renacentista. Usan el artificio, la dificultad en el estilo, el contraste, la provocación en el lector, etc.
Culteranismo
Su máximo representante es Luis de Góngora, quien cultiva la poesía culta, la belleza formal y la brillantez colorista. Usa una cuidada elaboración de la lengua y muchos recursos literarios (metáforas, hipérbatos, cultismos y sonoridad de vocablos). Obras: Fábula de Polifemo y Galatea.
Conceptismo
Sus máximos representantes fueron Francisco de Quevedo y Baltasar Gracián. Tienden a la concisión y a la densidad expresiva, buscan la agudeza y el ingenio, y utilizan muchos recursos literarios (elipsis, paradojas, antítesis, hipérboles, retruécanos).
La Poesía
Hereda e intensifica algunos rasgos de la lírica renacentista, pero también rompe con muchos moldes clasicistas de la literatura anterior.
Métrica
La métrica y las estrofas italianas conviven con los versos y las formas más líricas castellanas. El verso endecasílabo, sonetos, octavas reales, silvas… se siguen utilizando por los poetas barrocos. Abunda la métrica castellana (quintillas, redondillas…), para los versos de carácter satírico-burlesco, y las letrillas, los romances o los villancicos son utilizados abundantemente por autores cultos, como Lope de Vega o Góngora.
Temas
- Poesía amorosa o sentimental: Aún perviven la herencia del petrarquismo y sus tópicos e imágenes más tradicionales. El petrarquismo anterior queda renovado por Lope de Vega y Quevedo.
- Poesía de carácter moral y metafísico: Trata temas como la vida retirada, el paso del tiempo, lo efímero de la belleza o reflexiona sobre la propia existencia, el desengaño de este mundo, etc.
- Poesía religiosa: Movida por la devoción y la piedad que muestran diversos poetas (Lope de Vega).
- Poesía de carácter satírico-burlesco: Donde se cuestionan y se parodian tipos y personajes, mitos, vicios, costumbres, etc.
La Prosa
En este siglo aparecen distintos tipos de prosa:
- La novela corta: Iniciada por Cervantes con las Novelas ejemplares, sigue cultivándose con bastante éxito en la primera mitad del siglo XVII. Entre otros autores, destacan María de Zayas (Novelas ejemplares y amorosas) y Cristóbal Lozano (Soledades de la vida y desengaños del mundo).
- La novela bizantina: Se siguen escribiendo obras derivadas de la novela bizantina del siglo anterior. Un ejemplo es El peregrino en su patria, de Lope de Vega, quien también cultiva la novela corta y pastoril.
- La novela alegórica: Su mayor representante es Baltasar Gracián, autor de El Criticón, de carácter doctrinal.
- La novela costumbrista: Sus páginas son de carácter descriptivo y pintoresco o abundan en mayor grado el humor y la sátira social. Entre sus principales representantes destacan Agustín de Rojas (El viaje entretenido) y Luis Vélez de Guevara (El diablo cojuelo).
La Novela Picaresca
Tiene su auge en el siglo XVII con narradores como Mateo Alemán (Guzmán de Alfarache) y Vicente Espinel (Vida del escudero Marcos de Obregón), y obras como El Estebanillo González (anónima) y El Buscón, de Francisco de Quevedo.
Las características de esta novela son: narración en primera persona; acontecimientos y peripecias realistas; el pícaro nace en una familia sin honor; el pícaro no consigue cambiar de clase; la obra es abierta (se pueden incluir nuevos episodios); el pícaro siempre es víctima de sus propios actos; y en algunas obras se puede apreciar un tono moralizador.
Poetas y Prosistas del Siglo XVII
Luis de Góngora y Argote (1561-1627)
Nació en Córdoba en una familia ilustre. Cursó estudios en la Universidad de Salamanca y fue capellán de honor del rey.
Su obra literaria es casi exclusivamente poética. Cultiva la poesía tanto en sus formas tradicionales y populares como en lo culto. El tono de sus versos suele ser grave, bello y noble, o bien caricaturesco, humorístico, festivo y burlesco.
Letrillas y Romances
- Letrillas y romancillos (Lloraba la niña y Hermana Marica): Gran variedad temática (vivacidad, belleza, gracia y encanto), aunque no renuncia al lenguaje elaborado ni al artificio de su estilo culterano.
- Romances (Amarrado al duro banco y Servía en Orán al rey): Góngora trata diversos temas y motivos (amorosos, religiosos, mitológicos, burlescos, etc.).
Sonetos
Los temas que suele usar en los sonetos son el amor, la alabanza, el desengaño… Los sonetos más importantes son: Mientras por competir con tu cabello, Ilustre y hermosísima y La dulce boca que a gustar convida. Son de perfecta estructura y perfección formal. Góngora busca un lenguaje poético distinto y consumado, la belleza verbal plena, y para ello hace uso de muchos recursos literarios (hipérbatos, metáforas, metonimias, antítesis, cultismos, etc.).
Poemas Mayores
- Fábula de Polifemo y Galatea: Escrita en 63 octavas reales, inspirada en las Metamorfosis de Ovidio. Cuenta cómo el cíclope Polifemo, enamorado de la ninfa Galatea y celoso del pastor Acis, mata a este arrojándole una peña. La ninfa convierte a su amado en río. La originalidad de Góngora no reside en la historia, sino en la construcción y modulación del poema y en el lenguaje típicamente gongorino.
- Las Soledades: Comienza con la llegada a tierra de un joven náufrago desdeñado por amores. Góngora vierte en sus silvas los versos más elaborados y el lenguaje más exuberante, suntuoso y culterano de toda su producción poética. Dedicada al duque de Béjar, no la llegó a completar; solo escribió dos soledades, y la segunda está inacabada.
Francisco de Quevedo y Villegas (1580-1645)
Nació en Madrid, estudió en Alcalá y Valladolid, pasó un tiempo en Italia y sufrió prisión en la cárcel de San Marcos de León.
Fue un poeta famoso en vida. Escribió sonetos, romances, letrillas, canciones, epístolas, etc. También es un prosista excepcional, tanto en sus escritos doctrinales y políticos como en sus obras satíricas y festivas.
Obra Poética
Con un magistral y absoluto dominio de la lengua y de todos sus recursos poéticos, su obra poética puede clasificarse en:
- Poesía amorosa: Poemas que se inscriben en los convencionalismos de la lírica amatoria de la época. Además del artificio y de la belleza del lenguaje, sabe infundir a estos versos un sentimiento y una emoción que suelen trascender cualquier tópico literario.
- Poesía metafísica: En estos poemas trata temas como la angustia vital, el desengaño, la resignación, la fugacidad de la vida, la presencia de la muerte…
- Poesía moral: Quevedo adopta la actitud del moralista barroco que critica, satiriza y fustiga las debilidades humanas (hipocresía, ambición, egoísmo…).
- Poesía satírica: Quevedo no tiene par en la poesía satírica española. Alude en sus poemas a:
- Personajes de la sociedad del siglo XVII (médicos, boticarios, mujeres, borrachos…)
- Escritores y cuestiones literarias; especialmente Góngora y el culteranismo.
- Mitos (Orfeo y Eurídice, Hero y Leandro, Apolo y Dafne).
- Personajes históricos (Pilatos, Nerón).
- Personajes y héroes literarios (Orlando, el Cid).
Obra en Prosa
- Los sueños: Formada por cinco sueños: Sueño de las calaveras, El alguacil alguacilado, Las zahúrdas de Plutón, El mundo por dentro y La visita de los chistes. Obra singular, con una mirada burlesca, pero también preocupada, desengañada y crítica de la sociedad española de su época. Utiliza el ingenio que le es propio y un lenguaje que domina y moldea a la perfección.
- El Buscón: Su mejor obra en prosa y la culminación de la novela picaresca. Pablos, el protagonista, hijo de padres ejemplares, tiene un tío verdugo. En la Universidad de Alcalá, sufre burlas crueles. Se entera por su tío de que su padre ha acabado en la horca. Marcha a Madrid, donde acaba en la cárcel por robar. Luego es apaleado por intentar fingir casarse con una prima de don Diego. Después es cómico en Toledo y jugador tramposo en Sevilla, y acaba participando en algunas muertes. Don Pablos, pícaro hecho a sí mismo, es un muñeco en manos de Quevedo, quien, al igual que hace con otros personajes, lo zarandea física y moralmente.