Modernismo y Generación del 98
Contexto Histórico y Cultural
A comienzos del siglo XX, el pensamiento se vio inmerso en una crisis del positivismo y el racionalismo. Avances científicos como la teoría de la relatividad de Einstein cuestionaron el optimismo racionalista. La realidad, antes considerada objetiva y absoluta, se volvió relativa e inestable, y lo irracional se aceptó como otra forma de conocimiento. En este contexto, surgen el Modernismo y la Generación del 98.
Modernismo y Generación del 98: Reacción a la Crisis
Tanto el Modernismo como la Generación del 98 son producto de la crisis de la conciencia burguesa de finales del siglo XIX. Ambos movimientos reaccionan contra la vida burguesa, el espíritu utilitarista y materialista, y los movimientos estéticos precedentes. Buscan un nuevo lenguaje literario y artístico capaz de expresar un mundo más complejo, o al menos una visión más personal e íntima del mismo. Además de la influencia del posromanticismo, se observan influencias del impresionismo (sugiriendo el todo a través de la selección de detalles significativos) y del expresionismo (mostrando la realidad desde una perspectiva deformante, hiperbólica y grotesca).
El Modernismo
El Modernismo es una corriente de renovación estética que sintetiza la actitud innovadora de finales del siglo XIX, derivada de la crisis de la conciencia burguesa. Rechaza el materialismo y el espíritu utilitario de la época. Busca expresar la belleza con una sensibilidad renovada y un nuevo lenguaje, preciso y rompedor con el realismo y costumbrismo vigentes. Posteriormente, adopta un tono más intimista y esencial, menos artificioso.
Este movimiento supuso una importante renovación literaria, especialmente en la poesía y la prosa poética. Sintetiza diversas influencias, tanto de la literatura española como de la extranjera, en particular del parnasianismo francés (culto a la belleza, perfección formal y el arte por el arte) y el simbolismo (búsqueda de la musicalidad y la sugestión a través de símbolos).
Características del Modernismo
- La belleza: Frente a la vulgaridad burguesa, los modernistas buscan crear belleza. El arte y la belleza son los nuevos ídolos. Crean una literatura sensorial, rescatando versos como el alejandrino. Lo raro es bello.
- La melancolía y el vitalismo: Como los románticos, los modernistas experimentan la angustia existencial.
- El escapismo: Búsqueda de vías de escape ante la realidad ingrata.
Autores Destacados
Rubén Darío
Rubén Darío es el máximo exponente del Modernismo. Su obra representa la evolución del movimiento: un primer periodo de gran plasticidad y sonoridad, seguido de un segundo periodo de mayor intimismo y angustia.
Manuel Machado
Con un estilo personal, combina la influencia francesa con la raíz popular andaluza. Abarca temas ligeros y frívolos, así como temas graves y reflexiones melancólicas, a veces con un tono coloquial. Su poesía se caracteriza por su perfección formal y carácter estético.
Antonio Machado
Machado concibe la poesía como una palpitación del espíritu, alejándose de los excesos formales modernistas. Se distinguen tres etapas en su poesía:
- Modernista con influencias de Bécquer y el simbolismo. Escribe Soledades, definiendo su poesía como «la palabra esencial en el tiempo».
- Refleja la influencia del paisaje y la gente castellana, con sus virtudes y defectos. Se acerca a las preocupaciones éticas y sociales de la Generación del 98.
- En Nuevas Canciones, muestra un cierto decaimiento lírico, utilizando metros populares y centrándose en inquietudes filosóficas.
Valle-Inclán
Aunque principalmente dramaturgo y novelista, Valle-Inclán también escribió poesía modernista medievalizante, como Aromas de Leyenda.
Miguel de Unamuno
La poesía de Unamuno, cercana a la Generación del 98, se mantiene al margen del Modernismo. Es sobria, reflexiva y metafísica. Expresa sus ideas y obsesiones sobre la inmortalidad del alma y la esencia de España.