RENOVACIÓN Romanticismo
A partir de 1850 comienza a expresarse una nueva sensibilidad que culminará en una renovación poética caracterizada por:
1) Limitación de la retórica ROMántica
2) Uso de un lenguaje sencillo
3) Preferencia por un ritmo suave, estrofas elementales, rimas asonantes y el verso blanco
4) Predominio del sentimiento por encima de la razón y la imaginación en una poesía cercana a la gente humilde. || Los autores fundamentales de este nuevo rumbo poético son Gustavo Adolfo Bécquer y Rosalía de Castro. El género narrativo más cultivado en España durante los primeros años del Siglo XIX es el costumbrista (género basado en la descripción de formas de vida colectiva, de ritos y hábitos sociales que entronca con el sentimiento nacionalista y con la preocupación por fijar lo típicamente español;, estrechamente relacionado con la aparición de la prensa periódica. Mariano José de Larra, considerado creador del periodismo español, fue su principal representante. Defensor del liberalismo y de la modernización de España, en sus artículos crítica con ironía, sarcasmo y amargura los defectos del pueblo español.
Realismo
La narrativa del último tercio del Siglo XIX, y dentro de ella, la novela, será el género más importante de una nueva tendencia: el Realismo.
Sus rasgos más comunes son:
1) Ilusión de objetividad
2) Creación de una actitud reflexiva y moral en el lector.
3) Narrador omnisciente que no se limita al relato de la acción, sino que introduce comentarios y reflexiones de todo tipo. Pero también la utilización de un narrador impersonal, neutral y oculto.
4) El relato de la acción sigue un orden cronológico.
5) la realidad es el punto de referencia, lo que explica la abundancia y exactitud de las descripciones, así como la ambientación contemporánea de los argumentos.
6) Las novelas se centran en la vida del personaje, explicada por sus relaciones con la sociedad en la que habitan. Se realizan extensos análisis de su piscología.
7) Los temas tratados son el sentido de la vida el -oder del dinero 0 el conflicto entre el deseo de felicidad la vid pública, aunque sin ofrecer soluciones ni pautas morales.
8) Personajes sacados de la realidad cotidiana. Ni héroes ni antihéroes trágicos, sino seres grises, llenos de contradicciones y dudas, capaces de desprecio, generosidad y egoísmo; de grandezas algo ridículas y de miserias y mezquindades. Suelen ser personajes frustrados, vencidos incluso cuando consiguen sus propósitos, que deben adaptarse al medio si no quieren desaparecer
9) utilización de un lenguaje cercano a la “naturalidad”, lo que conlleva una mayor riqueza expresiva y un mayor valor comunicativo.
Principales autores: Benito Pérez Galdós
El mejor novelista después de Cervantes. Escribíó un total de 77 novelas. Con Ia publicación en 1881 de La desheredada comenzó las llamadas novelas españolas contemporáneas. Galdós se centró en el análisis de lo que llama “dolencias sociales”: la hipocresía, las falsas apariencias, la corrupción e inmoralidad de ciertas conductas, la ineficacia de la administración, el egoísmo burgués, la falta de caridad, el adulterio, la sexualidad de los sacerdotes… Destaca Fortunata yJacinta, su novela más extensa y compleja, en la que hace destilar infinidad de personajes y ambientes madrileños. Entre las novelas en que se impone la espiritualidad destaca Misericordia.
En Tristana plantea el tema de la emancipación de la mujer.
Leopoldo Alas, Clarín
Fue un destacado y temido crítico literario if escribíó varios volúMenes de cuentos y novelas breves y dos grandes novelas:
La regenta y Su único hijo.
La regenta es considerada una de las grandes novelas del Realismo español. En ella Clarín recrea el microcosmos de una ciudad provinciana (Vetusta), en tiempos de la Restauración. Se desarrolla la acción en tres ámbitos: el clero y su espacio más significativo, la catedral; la burguésía provinciana que confluye en el casing; y la aristocracia local representado por los marqueses de Vegallanes. Tras la aparente respetabilidad de muchos personajes se encierra un mundo corrupto y mezquina Otros autores realistas destacados son Pedro Antonio Alarcón con El sombrero de tres picos y Juan Valera con Pepita Jiménez. » ||
El Siglo XIX se cierra con dos destacados defensores del Naturalismo en la novela: Emilia Pardo Bazán; autora de Los pazos de Ulloa y La madre naturaleza; y Vicente Blasco Ibáñez, gue en sus novelas de ambiente valenciano Arroz y tartana, La barraca, o Cañas y barro aplica las ideas naturalistas de Zola.