5.1. La Generación del 98: definición y carácterísticas
INTRODUCCIÓN.
-Desde el punto de vista temático, van a centrarse en:
a)
El tema de España, enfocado desde una visión subjetiva e individualista, personal y diferenciada para cada autor, pero con una intención común clara: el descubrimiento del alma de España por medio de:
– El paisaje, en especial, el de Castilla, en el que descubren el espíritu austero y sobrio del hombre castellano.
– La historia, pero no la de los grandes acontecimientos políticos o bélicos, sino la del hombre anónimo y la de la vida cotidiana, a la que Unamuno llamó intrahistoria.
– La literatura, volviendo a los autores medievales como Berceo, Rojas o Manrique, y a los clásicos olvidados como Góngora o Gracián. Especial interés muestran por Cervantes y Larra.
b)
El tema existencial, que abarca desde la preocupación por el sentido de la vida, pasando por los conflictos psicológicos que origina la personalidad del hombre, hasta los problemas de carácter religioso. Las distintas actitudes ante estos temas difieren entre unos autores y otros -angustia y obsesión por el deseo de inmortalidad en Unamuno, el paso del tiempo en Machado, preocupación por la caducidad de lo terrenal en Azorín o incredulidad religiosa en Baroja.
– Desde el punto de vista del estilo:
La técnica estilística y literaria también se vio afectada por el talante reformador. El aspecto más carácterístico es el rechazo a la expresión retoricista y grandilocuente. Todos ellos proclaman la necesidad de un retorno a la sencillez y la claridad, pero sin perder la fuerza expresiva.
Tienden a la precisión léxica y la simplicidad sintáctica.
Priman la subjetividad: su reflejo de la realidad será personalísimo, individual, a veces fragmentado y a veces lírico o intelectual, mediante narradores protagonistas que se alejan de la omnisciencia.
5.2. La poesía de Miguel de Unamuno y de Antonio Machado
La poesía es una muestra más del lirismo y la subjetividad de la obra de los autores del 98. Los poetas noventayochistas más destacados fueron: Unamuno, Valle Inclán y, sobre todo, Antonio Machado.
Unamuno se esfuerza por alejarse del énfasis retórico que había caracterizado la lírica ROMántica. La suya es una poesía de la vivencia y de la experiencia. Se distinguen tres grandes temas: la familia, la patria y la religión, además del paisajístico (en especial, de Castilla y Vizcaya) con el que se incorpora a la corriente noventayochista. En su métrica prefiere la rima asonante o el verso libre pero también se percibe la tradición en el uso del soneto y romances..
Unamuno entiende la poesía como una asociación poética de las imágenes, cargada de pensamiento, o sea, reflexiva y generalmente filosófica, de ahí que se hable de poesía intelectual, pero siempre con un argumento lírico. Su estilo es sobrio, denso conceptualmente. Su temática más filosófica y: personal gira en torno a la inmortalidad, la identidad del ser, la intuición como forma de conocimiento…
Sus obras principales son: Poesías ( 1907), Rosario de sonetos líricos (1911), El Cristo de Velázquez (1920), Romancero del destierro (1928) y Cancionero, publicado póstumamente
En definitiva, la poesía de Unamuno se aleja de la carácterística de los modernistas y crea su propio ideal de poesía, absolutamente personal, a partir de la lectura de sus poetas preferidos (Leopardi, Whitman…) y centrada en sus temas obsesivos que veremos también en sus ensayos y novelas.
3.2. Antonio Machado
Nacíó en Sevilla, en 1875, pero su trabajo como catedrático de francés le llevó a Soria donde conocíó a Leonor con la que se casó cuando ella tenía dieciséis años. Tres años después Leonor murió, y Soria y Castilla se convirtieron en temas esenciales de su obra. A la muerte de Leonor, se trasladó a Baeza donde permanecíó desde 1912 hasta 1919, año en que regresó a Castilla. En 1928 se enamoró de Pilar de Valderrama, «la Guiomar» de sus versos. Evoluciónó ideológicamente hacia la izquierda y murió en el exilio en 1939.
TICA
Machado, a lo largo de su vida, nos dejó varias definiciones de poesía: «La poesía es palabra esencial en el tiempo» y «La poesía es el diálogo del hombre, de un hombre con su tiempo». En la primera definición el adjetivo «esencial» debe entenderse como la tendencia a hacer una poesía cada vez más sencilla desde el punto de vista formal. Esta intención explica el proceso de alejamiento del Modernismo canónico que lleva a cabo a lo largo de su trayectoria poética, hasta llegar a la esencialidad de Nuevas Canciones. El situar la palabra (la poesía) en el tiempo es una afirmación de compromiso con su tiempo, con su realidad. Antonio Machado no es un poeta escapista, sino todo lo contrario, volcado con su realidad y con los problemas que ella plantea; a)
el problema existencial, b) el problema religioso, c) el problema amoroso yd) el problema social. El sustantivo «diálogo» alude a la concepción de la poesía como un intercambio entre diferentes personas poéticas. Las personas poéticas que «dialogan» en sus poemas serán variadas, pero destacan: el propio autor, que dialoga consigo mismo (es carácterístico del primer libro, Soledades. ); Castilla ylas gentes de Castilla; Leonor (o su recuerdo); Guiomar.
MAS
Los temas más destacados son:
El problema existencial
. El conjunto de temas del paso del tiempo que conduce a la muerte marca toda la obra poética de Antonio Machado. De esa idea, como ya hemos visto, parten la mayoría de sus símbolos y motivos temáticos. La presencia de la muerte será, por tanto, obsesiva en sus poemas, hasta el punto de que la propia vida se ve como una amenaza, puesto que encierra la muerte como consecuencia inevitable. Esto explica el tono de tristeza, angustia y melancolía que tiñe la literatura de Machado.
. El sentimiento amoroso no aparece con claridad en sus poemas, porque Machado lo usa siempre en relación con otras preocupaciones que le Interesan más (melancolía, fluir del tiempo, tristeza, soledad, etc…). La mujer en los poemas de Machado presenta tres tratamientos diferentes que corresponden con tres momentos distintos de su trayectoria poética. La mujer abstracta (aparece en Soledades) como una aparición o un deseo que nunca llega a realizarse;
la mujer concreta, Leonor, que le servirá, a partir de Campos de Castilla como objeto amoroso, y como motivo para reflexionar sobre el