Angustia vital

TEMA 2. LÍRICA ROMÁNTICA. Gustavo Adolfo BÉCQUER

El Romanticismo aparece en Alemania y Reino Unido a finales del s.XVIII, extendíéndose al resto de Europa en la primera mitad del S. XIX y surge como una reacción contra el pensamiento racionalista de la Ilustración, suponiendo una revolución estética e ideológica.El Romanticismo no es una simple corriente literaria, sino un amplio movimiento que abarcó todos los sectores de la cultura y de la vida europea. Su fundamento se haya en una profunda crisis en los siguientes aspectos:a) Crisis en lo social y lo político: protesta contra el mundo de la burguésía y el poder que alcanzó. El hombre ROMántico está disconforme con los graves problemas políticos, se haya perdido y angustiado en una sociedad que no le satisface.b) Crisis en lo ideológico: aparece por una crisis del Racionalismo del siglo anterior, reacción contra el Imperio de la Razón y surge el espíritu, el poder creador. Reclaman el derecho a la imaginación, el sentimiento y la pasión.c) Crisis en lo estético: el autor ROMántico no quiere los cánones y reglas que se impusieron en el Racionalismo de la Ilustración, nada puede limitar, contener o reprimir el espíritu. No se busca el orden y el equilibrio, sino la fuerza sentimental y la intensidad expresiva, apareciendo lo irracional y lo misterioso. Por encima de todo, está el “yo” creador y su libertad de creación.1. Carácterísticas.Individualismo: el hombre señala sus propios fines. El artista se cree el centro del mundo, el intermediario entre el arte y los demás hombres.La libertad: el individuo proclama su derecho a expresarse y su libertad individual frente a la sociedad. Rechaza las reglas sociales y esto le lleva a un sentimiento de vacío y soledad, al pesimismo y desasosiego interior y a la continua insatisfacción.Rebeldía: buscan el ideal de felicidad y plenitud que no se cumple por la realidad circundante, lo que les conduce a su fracaso existencial. Por ello, adoptan una idea de pesimismo y angustia vital, que les lleva a evadirse. Esta evasión puede llevarse a cabo mediante el espacio (exotismo) o el tiempo (la EM).Nacionalismo: frente al universalismo de la Ilustración, el ROMántico proclama el nacionalismo político dando relevancia a las tradiciones y al arte popular, a las costumbres y valores tradicionales.  Introdujeron supersticiones, leyendas y motivos fantásticos y de misterio.2. Romanticismo en España.Durante la primera mitad del Siglo XIX perdurará en España el Neoclasicismo, la Ilustración y el Racionalismo del Siglo XVIII. En España, el Romanticismo es un fenómeno tardío ya que hasta la década de los treinta no aparece el nuevo movimiento que se introduce por el regreso de los exiliados liberales (Espronceda). Con este regreso, el Renacimiento se impuso totalmente en España.Entre 1834 y 1844, el Romanticismo español alcanza su máximo auge distinguíéndose dos grandes corrientes: Romanticismo Liberal (Espronceda) y Romanticismo  Tradicional, más moderado (Zorrilla).El estreno de Don Álvaro o la fuerza del sino en 1835, marca la fecha de inicio del Romanticismo en España.3. Los temas ROMánticos.El sentimiento desgraciado: rasgo central del ROMántico: conciencia desgraciada, angustia ante lo incompleto de la vida y la angustia humana, la vida es un problema: es fugaz e inconsistente, tema frecuente es el de las “ruinas”: símbolo de caducidad. La obsesión por la muerte es lo que les quitará la angustia vital.El desacuerdo con el mundo: eterno descontento de los ideales de libertad y felicidad. El hombre ROMántico no encuentra los ideales que busca, lo que le produce el desengaño que se manifiesta en forma de rebeldía: el autor lucha contra la política y sociedad de su tiempo. Busca la evasión en el tiempo (evocaciones a la Edad Media y retornos al pasado) o en el espacio (gusto por lejanas y exóticas tierras). Una forma extrema de evasión es el suicidio (Larra) pero también habrá gusto por lo ascético como forma de evasión del autor creyente.La exaltación del yo: el artista se siente un “genio”: superior al mundo que le rodea, prefiere aislarse, buscar la soledad antes que perder su “yo” en la sociedad del momento. Individualismo y subjetivismo excesivos.La libertad: exaltación de la libertad como prolongación del “yo”. Se rechazan las barreras sociales, políticas y artísticas. El artista está por encima de las normas de comportamiento; se rechazan las reglas impuestas por los neoclásicos para la creación literaria. Esta ansia de libertad vital le lleva también a angustiarse por el destino.La naturaleza: adquiere un papel especial, se adapta a los estados de ánimo del escritor. La naturaleza será melancólica, tétrica, turbulenta. Gusto por la noche, la soledad y los paisajes sepulcrales y recónditos.4. La Lírica ROMántica.La poesía es el género más adecuado para expresar la actitud ROMántica: la rebeldía ante el mundo y la expresión de los sentimientos más íntimos.El paisaje y la naturaleza se convierten en fiel reflejo de la interioridad del poeta. Es una naturaleza salvaje, turbulenta y pesimista. Sus escenarios son el mar bravío, las ruinas, las tormentas, la noche, los cementerios, lugares abandonados,….Etc. En los aspectos formales, cabe destacar la polimetría y nuevos ritmos acentuales que confieren gran sentido musical a los poemas. El lenguaje es culto y retórico.Se distinguen dos tipos de poesía:Poesía narrativa: de tono heroico. Esta poesía recoge sus temas de la tradición, la historia o la leyenda y rehabilita el romance (Espronceda).Poesía lírica: es la expresión emblemática del Romanticismo porque en ella confluyen los conflictos interiores del poeta. Sobresalen Espronceda, Bécquer y Rosalía de Castro. En ella prevalecerá el pesimismo y la concepción del amor como fuente de dolor y desengaño.4.1. Espronceda.José de Espronceda (1808-1842) es tanto por su vida como por su obra el poeta de Romanticismo español por excelencia. Dentro de su poesía, encontramos las dos tendencias antes señaladas:Poesía narrativa, a la que pertenece El estudiante de Salamanca. Historia de ambiente misterioso y nocturno que narra la peripecia de Félix de Montemar, seductor al estilo de Don Juan. Encontramos en ella todas las carácterísticas de la época en cuanto a ambientación (nocturnidad, seres fantasmales, tempestades, sepulcros,…), aspectos formales (variedad métrica, uníón de lo narrativo, lo lírico y lo dramático), mezcla de lo sublime y lo vulgar, conflicto entre la vida y la muerte, y la rebeldía del poeta contra el orden universal. Consta de 1704 versos distribuidos en 4 partes. El ambiente de nocturnidad, misterio, mundo sobrenatural en la que transcurre la obra, sobre todo en la cuarta parte favorece la proliferación del lenguaje propio del “Romanticismo lúgubre”, al que Espronceda se sentía particularmente inclinado.También es poesía narrativa El diablo mundo, la obra más ambiciosa de Espronceda que dejó sin concluir. Consta de seis cantos en los que nos presenta un amalgama de lo lírico, narrativo, dramático, cuadro de costumbres, …. Se plantea la fugacidad de lo creado, la relación individuo-sociedad, conflicto vida-muerte, etc.Poesía lírica: sobresalen La canción del pirata, El mendigo, y, sobre todo, El canto a Teresa (canto II de El diablo mundo), que el poeta dedica a la muerte de su amada Teresa Mancha. El desengaño es el tema principal. El poema aborda el destino del hombre, la historia de la vida en momentos culminantes.4.2. Gustavo Adolfo Bécquer.Nace en Sevilla (1836 – 1870) cuando en Europa ya había entrado en decadencia el movimiento ROMántico, pero representa la culminación del Romanticismo intimista español. De su producción en prosa sobresalen las Leyendas, de gran calidad literaria. Se trata de un conjunto de narraciones breves que tienen como tema algún hecho extraordinario o sobrenatural. Destacan El monte de las Ánimas, Los ojos verdes, Maese Pérez el organista, El rayo de luna, El Miserere..En las leyendas de Bécquer se dan los caracteres ROMánticos más genuinos: melancolía, pesimismo, tristeza, afición a lo vago e indefinido, a la fantasía y el ensueño, marcada tendencia a lo sobrenatural; medievalismo; pasión, melancolía; afición a los cementerios, las ruinas,…Su obra poética se reduce a Rimas, cuya primera edición completa (1871) fue publicada por los amigos del poeta tras su muerte. Bécquer había recopilado sus poemas en un manuscrito ( El libro de los gorriones), pero éste se quemó en un incendio.Las Rimas abarcan dos aspectos fundamentales: la poesía y el hombre, con la implicación del amor en sus más distintas derivaciones: gozo, exaltación, ruptura y desengaño. En el tema amoroso, funde la experiencia personal con la tradición erótica y el simbolismo.Los editores no respetan el orden original de las Rimas. Bécquer, probablemente, fue copiándolas sin orden preciso, pero sus amigos les dieron la numeración que casi todas las ediciones posteriores han reproducido y que se tiene ya por tradicional. En su conjunto, las Rimas ofrecían el desarrollo de una historia de amor que partiendo de una primera etapa feliz y esperanzada, celebra luego el amor, llora después su desengaño y canta, por ultimo, la más angustiosa soledad. La clasificación temática de las rimas  sería: I – XI: la poesía como algo inexplicable.XII – XXIX: el amor tratado de forma positiva.XXX – LI: el amor desengañado, fracaso amoroso.LII – LXXI: la soledad y la muerte como resultado del fracaso.Los poemas de Bécquer presentan unos rasgos carácterísticos: intimidad, brevedad y sencillez, estructuras paralelísticas, predominio de la musicalidad, uso de la rima asonante, combinación de versos de arte mayor y de arte menor, y eliminación del retoricismo y de los epítetos innecesarios.Desde el punto de vista gramatical, su poesía presenta un predominio del estilo nominal y del presente en las formas verbales.La lírica de Bécquer entronca con la poesía popular, con el cantar y la copla.

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