TEMA 10. LA NARRATIVA HISPANOAMERICANA EN EL S.XX.
El desarrollo de la narrativa hispanoamericana en el Siglo XX ha estado condicionado por el modo de entender y narrar los hechos históricos y las realidades sociopolíticas y culturales.
Panorama general: se distinguen dos grandes orientaciones: la realista y la innovadora, que llegó a su esplendor con las obras de la nueva narrativa.
La nueva narrativa: la ruptura con el Realismo tradicional implicó un cuestionamiento del mundo percibido como real y de la idea de verosimilitud; las obras de Borges y la influencia del Surrealismo fueron determinantes en estos cambios, pero su consagración definitiva no llegó hasta los 60. En la nueva narrativa dominan dos tendencias: una que cultiva el Realismo, renovado en sus aspectos narrativos y lingüísticos, y otra que desarrolla la fantasía, cuyas manifestaciones son el Realismo mágico (incorpora elementos maravillosos) y el Realismo fantástico (introduce en la normalidad lo irracional, lo explicable, o que presenta la realidad como una ficción presidida por la ambigüedad y el caos).
Últimas tendencias: en los últimos años del S.XX se aprecia un distanciamiento de la complejidad estructural y lingüística, y del cuestionamiento de la realidad. Hay un regreso al Realismo, un estilo más accesible al lector, la presencia del humor y la parodia, y la preferencia por el tema del amor; aunque también existe una corriente que continúa con el experimentalismo y el antirrealismo. Se pueden destacar tres líneas: la novela testimonial (combina realidad y ficción) la novela histórica y la novela detectivesca.
Rasgos de la nueva narrativa: la nueva narrativa hispanoamericana se configuró con rasgos temáticos y formales propios de una nueva visión del mundo.
Rasgos temáticos.
1)La fantasía: lo irracional aparece como algo propio de la realidad cotidiana. Lo maravilloso proviene de creencias populares en mitos. Esta es la línea del Realismo mágico.
2)Lo fantástico: se percibe una realidad complejo, desordenada, ambigua, que se refleja lo misterioso y los mundos extraordinarios. Esta es la línea del Realismo fantástico.
3)La condición humana: se plantean los grandes problemas del ser humano en la sociedad contemporánea. La visión es en general pesimista: predomina el fatalismo y la desesperanza, la soledad y la derrota e infelicidad. Destacan los temas de la angustia existencial, la incomunicación, la soledad y el tiempo.
4)La literatura y el lenguaje:
La literatura constituye uno de los temas de ficción y existe una preocupación por la renovación del lenguaje poético.
La literatura constituye uno de los temas de ficción y existe una preocupación por la renovación del lenguaje poético.
5)El humor: presenta diversas expresiones como la burla divertida, satírica y humor trágico.
6)El erotismo: forma parte de la condición humana y se relaciona con las circunstancias sociales y culturales.
Rasgos formales: se advierte una complicación estructural. El narrador omnisciente se combina con otras voces narrativas lo que conduce a la superposición y multiplicidad de distintos puntos de vista. Existe una búsqueda de un nuevo lenguaje literario. Destacan el empleo de la variedad lingüística local, la lengua popular, la elaboración poética, el lenguaje simbólico y los neologismos.
Los inicios de la nueva narrativa.
El Realismo mágico: es una estética que integra lo maravilloso en el mundo narrado sin que se perciba como opuesto o distinto a lo real. Lo maravilloso, se basa en creencias de las culturas de las distintas regiones hispanoamericanas. Los autores que iniciaron esta tendencia son Alejo Carpentier y Miguel Ángel Asturias.
Miguel Ángel Asturias: es autor de una importante producción dentro del indigenismo. El señor presidente señala el comienzo de la nueva narrativa. Se enmarca dentro de la novela de la dictadura. En esta novela sobresale la presencia del mito. El narrador omnisciente incorpora rasgos líricos y el fluir de la conciencia. Estuvo influenciado por el Surrealismo, hallamos experimentaciones vanguardistas.
El Realismo fantástico: introduce hechos extraordinarios que perturban el orden cotidiano, o crea mundos irreales que indagan en el enigma de la existencia. En la década de los años 40 surgíó el maestro indiscutido de los nuevos narradores: el escritor argentino Jorge Luis Borges.
Jorge Luis Borges: la obra narrativa de Borges comenzó con Ficciones, que reunía dos libros de cuentos. La concepción idealista lo llevó a construir mundos de ficción que cuestionan la lógica de la realidad. Los temas de sus obras son metafísicos: la búsqueda (los protagonistas se afanan por encontrar el sentido del mundo, por descifrar misterios o por encontrarse a sí mismos) y el tiempo. Persiguió un estilo llano y se preocupó por simplificar el vocabulario y preferir las palabras habituales y narrar los hechos como si no los entendiera del todo. Intentó conseguir, no la sencillez, sino la modesta y secreta complejidad.
Desarrollo de la nueva narrativa.
Juan Rulfo.
El llano en llamas: este volumen reúne cuentos ambientados en zonas rurales que anticipan los rasgos del Realismo mágico. Utiliza técnicas realistas, al tiempo que incorpora en algunos relatos la visión mágica y misteriosa de un mundo desolado. A la realidad dura y brutal que viven los personajes, se añaden lo religioso, los milagros y las supersticiones. El lenguaje incluye rasgos dialectales y populares del discurso oral de los campesinos y enunciados breves en los que irrumpe lo poético.
Pedro Páramo: presenta una complejidad estructural que la aparta totalmente de la narrativa tradicional anterior. Las historias narradas en la novela se desarrollan mediante una estructura fragmentaria, que dificulta su lectura, con saltos cronológicos y con la interpolación de distintos relatos y narradores. Esta técnica ofrece diversos puntos de vista sobre lo ocurrido y permite introducir sueños y fantasías de los personajes. El estilo se caracteriza por un lenguaje sencillo y sobrio, mezclado con un discurso poético y con la reacción del habla popular.
Ernesto Sábato: los temas principales de sus obras son la soledad, la intercomunicación, la búsqueda del sentido de la vida y la existencia del mal.
Juan Carlos Onetti: su narrativa presenta una visión radicalmente pesimista del mundo. Sus personajes, conscientes del sinsentido de su vida, están condenados al fracaso.
Augusto Roa Bastos: concibe la literatura como un medio de denuncia de los males de la sociedad y de los grandes problemas de los seres humanos.
Julio Cortázar: es un autor de una importante obra cuentística, que cultivó desde sus inicios en la práctica desde sus inicios en la práctica literaria. En sus narraciones, Cortázar utiliza lo fantástico para plantar los temas que le preocupan: en situaciones realistas, en un mundo cotidiano, irrumpe lo insólito, lo irracional, lo inesperado, que altera y transforma la vida rutinaria. Sus textos incluyen también reflexiones sobre la creación y el lenguaje poético.
→Rayuela: la obra más conocida de la narrativa de Julio Cortázar, se publicó en 1963. Esta novela experimental rompe totalmente con la estructura y con el discurso de la narración tradicional. Antinovela, obra conformada por fragmentos dispuestos desordenadamente. Rayuela incluye reflexiones sobre la literatura y técnicas narrativas y llega incluso hasta la invención de un lenguaje, el gliígico, compuesto por palabras inventadas, pero que respeta las reglas morfosintácticas del castellano. Rayuela propone la búsqueda de lo esencial, de la armónía, de la unidad de los contrarios, que haga a los individuos más humanos y verdaderos. Junto a este afán por lo trascendente, la novela incorpora el humor y la ironía de forma constante, lo que sirve al autor para denunciar el absurdo de la vida y la retórica vacía de las grandes palabras.
Augusto Monterroso: Las narraciones y fábulas de Monterroso se caracterizan por incluir humor, sátira, ironía, parodia, y por su particular tratamiento de la literatura, de las preocupaciones sociales y de la realidad social.
Carlos Fuentes: Autor de una importante obra narrativa y ensayística, ha publicado cuentos. Su primera novela (La regíón más transparente,1959) reúne ingredientes de la nueva narrativa y muestra su actitud crítica ante la realidad de su país.
→La muerte de Artemio Cruz: Esta obra, heredera de la novela de a Revolución mexicana, canaliza la etapa posterior a la revuelta traicionada y la degradación de la burguésía. La novela se estructura mediante la sucesión de discursos o ‘’capítulos’’ narrados por tres voces: un yo y un tú (voz y conciencia de Artemio Cruz), desde su presente en el hospital; y además un relato en tercera persona, que aparece fechado y se sucede en orden decreciente de los más importantes hechos que han marcado su trayectoria. Esta técnica permite la inclusión de distintas perspectivas y la información sobre el pasado del protagonista, con cuya muerte finaliza la novela.
Gabriel García Márquez: Se inicia de la producción narrativa de 10 cuentos publicados en el periódico El Espectador, de Bogotá. En su primera novela, La hojarasca (1955), aparece por primera vez el pueblo de Macondo, y se anticipan acontecimientos que desarrollará la historia de Cien años de soledad (1967), famosa novela de éxito que terminará de consagrar la renovación de la narrativa hispanoamericana.
→Narrador, estructura y técnicas narrativas en Cien años de soledad: presenta un narrador omnisciente y hay también un lector ficticio. Los acontecimientos pertenecen al pasado, pero se narran por medio de avances y retrocesos temporales, y no se ofrecen datos que permitan situarlos históricamente. Un rasgo destacado en la organización: la circularidad. La novela presenta una estructura cerrada (fundación y desaparición de Macondo), en la que destaca la progresión de la trama basada en la repetición. El otro mecanismo es la semejanza y oposición: José Arcadio es semejante a su padre, y se opone a Aureliano, su hermano. Para algunos críticos, la circularidad del tiempo, el determinismo que gobierna la vida de los personajes, la maldición del incesto, la violencia, la soledad… Expresan el pesimismo existencial del autor y su concepción trágica de la vida.
→Cuentos y otras novelas: García Márquez ha mantenido su inicial dedicación al cuento: El coronel no tiene quien le escriba (1961) y La mala hora (1962), que narran las consecuencias de las guerras civiles; Los funerales de la Mamá grande (1962), sátira humorística del caciquismo; Relato de un náufrago (1970), y el muy valorado. Crónica de una muerte anunciada (1981) es la historia (basada, al parecer, en hechos reales) de un joven que va a morir asesinado, sin que nunca se sepa si es culpable de lo que se le imputa. Aunque todos los vecinos saben que el crimen va a ocurrir, nadie lo impide.
Guillermo Cabrera Infante En su primera novela, Tres tristes tigres (1966), destaca especialmente la presencia de los diferentes registros de la lengua hablada de La Habana de mediados del siglo pasado, rasgo que forma parte de la renovación estilística de la nueva narrativa. Los otros ingredientes son el humor, sobre todo verbal, y el amor, en los que subyacen los temas principales: el tiempo y la muerte. La habana para un infante difunto (1979) y La ninfa inconstante (2008)
Mario Vargas Liosa La narrativa de Mario Vargas Llosa se inscribe dentro del neorrealismo: un Realismo renovado en técnicas y en formas expresivas, que encierra una visión critica de la realidad social y política. Ha publicado cuentos y varias novelas.
→La ciudad y los perros La acción de esta famosa novela (publicada en 1963) se sitúa en el colegio militar Leoncio Prado de Lima, una institución cerrada y regida por normas, que finalmente muchos transgreden. Allí están «los perros» —los estudiantes recién ingresados, de diversa procedencia social—, que constituyen un grupo cuyo jefe es el Jaguar. El Esclavo joven marginado, tímido y débil, denuncia al culpable del robo de un examen de Química y es asesinado en unas maniobras. Su amigo el Poeta denuncia al Jaguar como autor del crimen, lo cual produce un enfrentamiento entre ambos. Ese lugar es una réplica de la sociedad peruana, del machismo y la violencia. Los temas son la violencia, la corrupción, el machismo y el determinismo social. La novela ofrece asaltos temporales y una perspectiva múltiple mediante la sucesión de narradores. Esta técnica permite la inclusión de distintas visiones del mundo de una sociedad degradada.