TEMAS
Tema central–
El tema central es el enfrentamiento entre la moral autoritaria y el deseo de liberad. Este es el núcleo temático del que derivan los demás motivos. Desde el comienzo, Bernarda impone sus normas mientras que Mª Josefa y Adela intentan rebelarse. Las demás hijas aceptan con resignación su destino aunque Martirio parezca oponerse alguna vez. Las criadas la temen. Bernarda marca la conducta que han de tener las hijas en todo momento pues todas las mujeres deben obedecerla. Sin embargo, el deseo de libertad en Adela, es más fuerte que el miedo que tiene a su madre y se rebela contra ella (abanico de flores, vestido verde), hasta que la confronta y la parte el bastón “recuperando” su libertad, pero para suicidarse momentos después. Mª Josefa se rebela a través de su locura, que la utiliza para expresar su deseo de libertad y para denunciar la tiranía y el sufrimiento del resto de mujeres. La tiranía de Bernarda desemboca en la locura de su madre y en el suicidio de Adela.
Amor sensual. B. del varón–
El drama de las mujeres es la ausencia de amor, pues Bernarda no permite tal posibilidad. La introducción de Pepe desencadenará las pasiones de estas mujeres que quieren librarse de su madre para ser felices. Empiezan los conflictos cuando Bernarda acepta a Pepe como futuro marido de Angustias. Las referencias al hombre y a la pasión amorosa se hacen mediante historias que pasan fuera de la escena y por medio de vivencias de los personajes. Alguna de estas referencias son el cuento de Paca la Roseta y la historia de Adelaida.
Vivencias auténticas
En el principio nos dan indicios de la pasión de Adela con el abanico (símbolo de pasión) y el traje verde con el que va al corral (lugar de relaciones amorosas). Después nos muestran como ha evolucionado desde los deseos a los hechos. Finalmente, cuando la pillan, se enfrenta a su hermana y afirma su libertad amorosa. El deseo que siente Martirio hacia Pepe solo sirve para acrecentar sus celos y envidia hacia Adela.La hipocresía–
Es el motivo recurrente con el que se oculta la realidad. La preocupación por las apariencias se refleja simbólicamente en la obsesión por la limpieza. El miedo a la murmuración es una constante en la vida del pueblo y marca la conducta de Bernarda, que por miedo a esto, oculta a su madre de la vista de las vecinas. Las hijas se quejan de que sus vidas estén acondicionadas a lo que pueda decir la gente. La hipocresía y el mundo de las apariencias afectan a Bernarda y a Martirio en la que la hipocresía en un rasgo característico, ya que revela su constante falsedad en alguna ocasión. En Bernarda esto se ve bien, cuando al morir Adela, quiere ocultar la realidad.
El odio y la envidia–
Las relaciones humanas están dominadas por el odio y la envidia.
Bernarda en el objetivo del odio de todos ya que la desigualdad e injusticia social hace que las criadas la odien, y su orgullo clasista e hipocresía hace que las mujeres del pueblo la odien. Angustia es odiado por sus hermanas y ella las odia. El odio, la envidia y los celos, hacen que Martirio acuse a Adela. En la obra, se manifiesta el odio, en acotaciones, en insultos, en insinuaciones y mediante expresiones directas. La imposibilidad de amar y ser libres, alimenta el odio y la envidia entre las hermanas.
La injusticia social–
En la obra Lorca expone las tensiones de la sociedad de su época. Denuncia la injusticia y la desigualdad social y la crueldad que dirige las relaciones sociales. Las relaciones humanas están jerarquizadas y dominadas por la crueldad de parte de quien está en una posición superior, con el de una inferior. El contraste entre la miseria y la riqueza se hace siempre, esto afecta, incluso a las hermanas y provocará el drama, puesto que Pepe elegirá a Angustias por su dinero. Cada personaje suele humillar a quien esté por debajo de él socialmente. Bernarda es muy tacaña y las criadas y su madre se quejan de ello, pero lo mismo pasa con la Criada y la mendiga. Los personajes de condición social baja, aceptan con resignación y odio, las relaciones establecidas.
La marginación de la mujer–
Lorca ha querido denunciar la marginación de la mujer en la sociedad de su época. Enfrenta dos modelos de comportamiento femenino, el basado en la moral relajada, y el basado en el concepto de decencia. Las mujeres del 1er grupo viven en aparente libertad, pero al margen de la sociedad y condenadas moral y físicamente por la opinión del pueblo. Las del 2º grupo están sometidas a las normas sociales que discrimina a la mujer en beneficio del hombre, ya que mientras ellas tienen prohibido cualquier impulso amoroso, a ellos se les está permitido básicamente todo. Esto también pone de relieve la sumisión de la mujer al varón. Aunque las hijas de Bernarda estén en el 2º grupo, Adela se irá identificando con las del 1ero.
La honra–
Está ligado al tema de las apariencias y al del amor. Bernarda se rige por unos principios convencionales que exigen una imagen social limpia. Este sentido de la honra (que también comparte Poncia) es la que permite el linchamiento de la hija de la Librada.