La literatura barroca: en busca de la perfección formal
En el Siglo XVII abundan los morales y los religiosos y se añaden los de tipo satírico, burlesco, crítica y filosófico. Las nuevas obras literarias incorporarán la tradición popular en un contexto de elevado nivel formal.
La forma primará sobre el contenido y la complejidad formal será sinónimo de belleza. Destacan tres aspectos: -el nacimiento de la novela moderna con Guzmán de Alfareche y El Quijote. -la comedia nueva. -la evolución de la lírica con dos tendencias: el culternaismo y el conceptismo.
La novela barroca: del género picaresco a la crítica moral
A finales del Siglo XVI Mateo Alemán publicó su novela Guzmán de Alfarache, Guzmán es una persona cultivada intelectualmente y sus orígenes no son humildes. También cabe destacar la narrativa didáctica de Baltasar Gracián. Sus obras muestran un gran afán de perfección formal.El teatro Barroco: la
Un género que destaca en el Siglo XVII es el teatro, que se adopta al gusto del público y se representa en locales acondicionados llamados corrales. La gente se mantenía de pie y la nobleza estaba en balcones y ventanas.
Lope de Vega (1562-1635, el gran renovador
Autor de trescientas catorce comedias, mezcla los aspectos más populares de la tradición literaria castellana con la tradición culta. Sus diálogos resultan muy naturales, adaptados a la condición social de los personajes. La renovación lopesca se resume en: -tres actos, y de los actos, en escenas. -ruptura de la regla de las tres unidades. – mezclan lo trágico y lo cómico. -se introduce el personaje »el gracioso». Los temas son el amor y la defensa del honor y también destaca la defensa de la monarquía. Suelen haber unos personajes arquetípicos que son: el noble, la dama, el caballero, el galán, el villano, el gracioso y el rey.Tirso de Molina (1583-1684), la individualidad de los personajes
Destaca por ser más culta y cuidada. Unos personajes alejados de los arquetipos creados por su predecesor. Los personajes de Tirso son de una gran profundidad psicológica y una marcada individualidad. Destaca como dramaturgo: El condenado por desconfiado y El burlador de Sevilla y convidado de piedra.Pedro Calderón de la Barca (1600-1681), el teatro reflexivo
Unas carácterísticas propias: -tendencia a la reflexión filosófica, un teatro más intelectual. -Complejidad de la acción dramática y en la elaboración formal de los diálogos. -menos escenas, pero mayor laboriosidad escenográfica. Los personajes se vuelven cada vez más complejos e individualizados, hasta el punto de convertirse en símbolos. Sus obras más conocidas son El alcalde de Zalamea y La vida es sueño.La lírica barroca: conceptismo y culteranismo
Un lenguaje claro y sencillo, por otro lado, caracterizada por su dificultad y rebuscamiento formal. Hay dos tendencias dentro de la lírica culta: -El culteranismo. Prevalece el contenido y usa un lenguaje muy culto repleto de latinismos, hipérbatos, palabras cultas, perífrasis verbales, etc. Sin duda como uno de los que más es Góngora, se alejan del habla vulgar y recurren a la mitología clásica en sus temas. -El conceptismo. Conceptos de forma ingeniosa. Sin duda dentro del conceptismo está Quevado, usan una expresión artificiosa e intentan decir lo máximo con el menor número de elementos, abundan las metáforas, las hipérboles, los símbolos, las paradojas, la ironñia, etc.